Cerveza artesana al estilo Trapense, profunda, con un color rojo – cobrizo, moderadamente fuerte, maltosa, compleja, con ricos sabores de malta, con toque de frutas. Su espuma es beige, grande, densa y cremosa, de larga duración. 

Su aroma es complejo y rico en aromas a malta, con algunos toques a chocolate, caramelo y/o tostado. Tiene ésteres frutales moderados, que por lo general incluye pasas y ciruelas, aunque también suelen estar presente el plátano o la manzana. El alcohol, si está presente, es suave y nunca se nota caliente ni solvente, con aroma a lúpulo especiado, herbáceo o floral, bajo o nulo, por lo general está ausente. La malta es más prominente en el equilibrio con los ésteres y con un toque de alcohol en el soporte, mezclados para una presentación armoniosa.

Esta cerveza tiene su origen en los monasterios de la Edad Media, y fue rescatada a mediados del año 1800, después de la era napoleónica.

5,9% Vol.

33cl.

Ingredientes: agua, *cuatro maltas de cebada, *lúpulo y levadura.

(*ingredientes de producción ecológica.)

Alérgenos: contiene gluten y sedimentos de levadura. 

Recomendaciones: tomar entre 10º y 8º C y conservar de pie.

Todo comenzó en aquel antiguo complejo agrícola gallego, el cual se fue apagando en las últimas décadas del siglo pasado, donde todavía era posible encontrar a personajes peculiares, y ¡Toupa era uno de ellos!

Pero… ¿Quién es Toupa? Toupa era un pariente por la parte materna del creador de Cervezas Toupiña, al que acompañó de niño por los campos de Lagazós, con un gran dominio de las tierra de Lalín, a veces cortando hierro, otras en Porral o Nabal cortando hortalizas… 

Algo que Toupa tenía claro era la importancia de respetar los ritmos de la tierra, entendía el mensaje que esta transmitía. Siempre estaba rodeado de animales, que eran como él, seres de la naturaleza. Todos esos valores que hoy en día conocemos como la agroecología ya los conocía de buena mano Toupa.

Fue Toupa quien tuvo sus primero contactos sensoriales y gustativos con la cerveza, en aquellos calurosos días de verano.

¿Por qué Toupiña?, era la forma cariñosa en la que se referían a Toupa, y como no podía ser de otra manera, tenía que ser el nombre de su cerveza. El mensaje pretende juntar todo ese amor y pasión por ofrecer el mejor sabor y continuar con el legado de Toupa, produciendo una cerveza artesanal y ecológica. 

Han sido muchas las catas a ciegas hasta llegar al que es hoy un excelente producto. Después de todo este proceso, es cuando han decidido mostrarlo al público. 

Desde Cervezas Toupiña les gusta que sus consumidores disfruten de sus cervezas, creando una marca única y artesanal, con productos 100% gallegos, con un sabor muy de aquí, de nuestra tierra, de la tierra de Lalín. 

Sus cervezas están elaboradas con los mejores ingredientes, son cervezas de calidad, y desde su obrador en el rural, creen en la importancia del producto. Son ecológicas, así como sus ingredientes naturales, cultivados de forma respetuosa y respetando siempre el medioambiente.

¡Perfecta para tomar bien fría y rodeado de la mejor compañía! 

Puedes acompañarla con unas conservas de los mares de galicia, como unos berberechos al limón, navajas al natural o unas sardinillas en aceite de oliva. Si quieres tirar por algo más clásico puedes también tomarla con unas aceitunas.